La metodología desarrollada se concentró en reconocer dos aspectos de los entornos alimentarios: el acceso físico (accesibilidad) y el acceso económico (asequibilidad) a los alimentos.
Para evaluar el acceso físico se realizó un análisis de proximidad a partir de la distancia en red caminando a unidades de comercio minorista de alimentos desde los hogares a partir del centroide de las manzanas urbanas de la ZMVM. Las unidades de comercio se clasificaron en supermercados, tiendas de conveniencia y comercio local. La tipología se retoma de la Clasificación Industrial Internacional del Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte (INEGI, 2018). Cuyos datos georreferenciados están disponibles en el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE). La distancia de las personas a los comercios, se midio con la distancia en red entre los establecimientos comerciales y los hogares. Estuvo calculada a partir de cada uno de los centroides de las manzanas con población de la ZMVM a todos los comercios sobre la red vial de la ciudad.
Para evaluar el acceso económico se estimaron tres índices socioeconómicos, escolaridad, educación superior y de computadora a partir de datos de los Censos de Población y Vivienda de 2010 y 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). En el cálculo se utilizó la aproximación propuesta por la Asociación Mexicana de Agencias de Inteligencia de Mercado y Opinión Pública (AMAI), que mide la satisfacción de las necesidades de todos los integrantes que habitan un mismo hogar (AMAI, 2018). Para obtener la estimación del NSE predominante a nivel manzana urbana se ordenaron los resultados de los índices socioeconómicos en un Análisis de Componentes Principales (ACP).
A partir de la integración de la accesibilidad y la asequibilidad, se clasificaron las manzanas de la ZMVM en desiertos, oasis y pantanos de alimentos. La metodología se realizó para 2010 y 2020 para lograr establecer comparaciones de cambio en los patrones de los entornos alimentarios de la misma zona geográfica.
Resultados
La tasa de crecimiento anual en la ZMVM entre 2010 y 2020 fue de 0.81%, este crecimiento se concentró en los contornos 3 y 4.
La población total con NSE alto (A/B) disminuyó 1% entre 2010 y 2020. En el NSE medio (C+, C, C) la población total aumentó 34%; y en el NSE bajo (D+, D, E) disminuyó 4%.
Los desiertos alimentarios fueron el entorno más abundante en el período 2010-2020 en toda la ciudad, pero se concentraron, junto con los pantanos, en las zonas periféricas del tercer y cuarto contorno. En estos sitios, las preferencias alimentarias de la población aunadas a las necesidades de acceso físico y económico determinarán la forma para acceder a alimentos más saludables.
Los pantanos alimentarios registraron el patrón de cambio más significativo porque la población en un pantano se duplicó entre 2010-2020. Los desiertos alimentarios concentraron el mayor número de habitantes y la tendencia de cambio señaló que la población en condición de desierto alimentario disminuyó 37%. Los oasis alimentarios concentraron el menor número de habitantes, sin embargo, la población aumentó 30%.
El patrón de cambio más importante fue el aumento de los pantanos, que en este estudio son considerados el entorno alimentario menos favorable para la seguridad alimentaria, sobre todo en los contornos de la ZMVM donde las personas tienen menor NSE y además, están condicionadas al acceso de alimentos de baja calidad.
En el tercer y cuarto contorno de la ZMVM es urgente aumentar la oferta de alimentos más saludables porque el patrón de cambio exhibe un aumento del 37% del NSE medio. Por lo tanto, aunque la población aumente su capacidad adquisitiva en los próximos años no cuentan con la garantía de acceso físico a alimentos más saludables.